El confesionario| llamada inoportuna

Hola V Bliss

Mi nombre es Carmen y tengo 27 años. Hoy quiero compartir con ustedes una experiencia que me sucedió hace unas semanas y que aún me causa una mezcla de diversión y frustración.

Erick, mi novio desde hace dos años, y yo habíamos planeado una noche especial solo para nosotros. Habíamos reservado una habitación de hotel, con la intención de pasar un rato íntimo y a solas, lejos de las distracciones del mundo exterior.

Las cosas comenzaron de manera prometedora. Nada más llegar a la habitación, Erick y yo nos entregamos a un beso apasionado que rápidamente se fue intensificando. Nuestras manos exploraban cada rincón de nuestros cuerpos.

Justo cuando las cosas se ponían realmente interesantes, mi teléfono comenzó a sonar. Era mi madre!!

Al principio, traté de ignorarlo, pero ella insistía una y otra vez. Erick y yo intercambiamos besos por todo el cuerpo, sabiendo que teníamos que atender la llamada.

Con un suspiro de resignación, contesté. Mi madre comenzó a bombardearme con preguntas sobre mi día, mi trabajo y mi salud. Traté de ser lo más breve y educada posible, pero ella parecía empeñada en mantener la conversación.

Mientras hablaba con ella, Erick no perdía el tiempo. Comenzó a repartir besos por vulva, provocando que tuviera que morderme el labio para no dejar escapar ningún sonido comprometedor. Tuve que hacer un verdadero esfuerzo por mantener la compostura y no delatar lo que estaba sucediendo.

Finalmente, después de lo que me parecieron horas, mi madre se despidió. Colgué el teléfono con una mezcla de alivio y frustración. ¡Justo cuando las cosas se ponían interesantes, ella tenía que interrumpirnos!

Erick y yo nos miramos con una sonrisa traviesa. Sin perder más tiempo, retomamos donde lo habíamos dejado, entregándonos a una sesión de sexo rudo y apasionado que nos hicieron olvidar por completo la molesta interrupción.

Al final, logramos disfrutar de una noche llena de orgasmos y conexión. Pero no puedo evitar reírme cada vez que recuerdo la cara de Erick cuando mi madre no dejaba de llamar. ¡Definitivamente, algo que no olvidaremos fácilmente!


Carmen

¿Te interesa?

SUSCRÍBETE PARA RECIBIR NOTICIAS Y OFERTAS ESPECIALES

¡Nunca mandamos Spam!

Deja un comentario

Descubre más desde VBliss

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo

Descubre más desde VBliss

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo